Además de proteger nuestros ojos contra golpes y accidentes, la detección y el tratamiento precoz de problemas de salud visual es la mejor manera de mantener una visión sana a lo largo de toda la vida.
Al llegar a los 65 años de edad, una de cada 3 personas tiene algún problema relacionado con la salud de sus ojos. La mayoría no lo saben debido a que con frecuencia no hay síntomas de aviso, o porque asumen que la reducción de la visión es parte normal del proceso de envejecimiento, y no tiene por qué ser así.
En muchos casos la pérdida de visión y la ceguera son prevenibles.
Dra. Erika Ruiz de Gopegui